En Internet estamos infoxicados, completamente saturados de información. A pesar de ello, no puede pasar ni un solo día sin que revisemos nuestras redes sociales en busca de nuevos contenidos para devorar. ¿Acaso somos unos sádicos?
La realidad es que tu audiencia quiere contenido fresco a diario y dárselo puede conllevar muchas ventajas para tu marca, tal y como confirma el estudio de Hubspot sobre la frecuencia de publicación. “Las empresas que publican más de 16 posts por mes obtienen 3.5 veces más tráfico que las que solo publica de 0 a 4 veces al mes“.
Cuanto más contenido publicas, más tráfico obtienes. Así de claro. Sin embargo, crear contenido relevante no es una tarea sencilla que pueda hacerse en pocos minutos. Por ello, en este post quiero hablarte de una técnica con la que serás capaz de contar con contenido para publicar de forma asidua sin invertir demasiado esfuerzo: la curación de contenidos.
¿Quieres saber cómo utilizar la curación de contenidos con eficacia para impulsar tu marca? ¡Sígueme la pista!
¿Qué es la curación de contenidos y cómo beneficia a tu marca?
Si estás familiarizado con el mundo del marketing digital probablemente ya habrás oído hablar de la curación de contenidos. La técnica de content curation no es novedosa. Se viene aplicando en el ámbito online desde hace mucho tiempo.
Si lo piensas, tú mismo habrás hecho curación más de una vez. Cuando compartes un contenido en tus redes sociales o das un “me gusta” a una publicación, estás haciendo curación de contenidos. ¿Qué significa? Sencillamente, estás recopilando un contenido que crees relevante y lo estás compartiendo con personas a las que les resultará interesante. Fácil ¿no?
Así pues, la curación de contenidos se basa en investigar, seleccionar y filtrar información de Internet relacionada con la temática de tu marca para después presentársela a tu público. Como content curator tú actúas como prescriptor de la información a tus seguidores.
Curar contenidos puede conllevar numerosas ventajas para tu marca. Esta interesante infografía de Curata recoge las principales.
La curación de contenidos ayuda a construir imagen de marca; aporta credibilidad y te convierte en referente sobre tu temática; nutre de contenido fresco y relevante a tus blog y redes sociales; impulsa la generación de leads; y mejora el posicionamiento orgánico de tu web a través de una visibilidad online continua, entre otros beneficios.
Como ves, la técnica de curación de contenidos es una herramienta con gran potencial para impulsar tu marca si la sabes implementar con eficacia. Para que te manejes como pez en el agua como curador de contenidos voy a contarte qué no debes hacer cuando te decidas a aplicar esta técnica en tu estrategia de marketing digital y Social Medial.
8 errores a evitar cuando realices curación de contenidos
#1 No marcarte un objetivo antes de hacer curación de contenidos
No, un objetivo no es querer llenar el muro de tus redes sociales con enlaces sin necesidad de tener que escribir nada. El contenido que cures debería tener como propósito los mismos objetivos que el resto de tu contenido.
#2 No comprobar qué estás difundiendo
Antes de curar y difundir cualquier contenido debes leerlo. Si no lo haces puedes caer en el error de difundir contenido erróneo o información falsa, algo que repercutirá negativamente en tu imagen de marca.
3# No dedicar tiempo a la curación de contenidos
La curación de contenidos no es una tarea banal que se pueda llevar a cabo en una pausa de café. Debes dedicar tiempo a esta técnica y hacerlo con mucho cuidado. El mimo que pongas en la curación de contenidos óptimos repercutirá en la calidad final del trabajo.
4# Plagiar un contenido y no reconocer la autoría
Nunca debes copiar un contenido. Plagiar está prohibido, no solo por ley sino por moral. Si compartes el contenido de un tercero debes reconocer siempre la fuente y atribuir la autoría al creativo que lo diseñó. Además, estarás beneficiando al linkbuilding de tu web.
#5 No aportar valor
No caigas en el error de curar contenido sin aportar valor agregado. Sí, un post tipo “el top 10 de…” puede atraer a tu web un buen volumen de visitas. Pero créeme, si tus artículos son siempre así, meras recopilaciones sin valorar, comentar o criticar de forma constructiva, vas a convertirte en un auténtico cansino. Tus lectores se marcharán, aburridos, por donde han venido.
Cura contenidos añadiendo tu toque personal. Da tu opinión sobre lo que compartes, analízalo, extrae conclusiones, en definitiva, aumenta su valor. No te limites a hacer una mera recopilación de datos. Lo que busca la curación de contenidos es proporcionar algo al usuario que no podría obtener en otro lugar.
#6 No filtrar lo que puede interesar a tu audiencia
Cuando se realiza curación de contenidos hay que tener muy presente los intereses de tus lectores. No consiste en filtrar aquellos contenidos que a ti te gusten o te parezcan interesantes. Has de curar los contenidos que son relevantes para tu audiencia, es decir, aquellos contenidos que darán respuesta a sus dudas.
#7 Conformarse con imitar a los demás
Para triunfar debes llegar allí donde otros no llegan buscando siempre la diferencia. Si te conformas con hacerte eco de aquellos contenidos que ya han sido curados anteriormente por otros, no vas a aportar nada diferente. Indaga, busca e investiga en busca de recursos desconocidos e interesantes. En la red hay grandes contenidos esperando ser descubiertos.
#8 Curar contenidos de Pascuas a Ramos
La constancia es una de las claves para el éxito en la curación de contenidos. Solo así se consigue fidelizar a tu público. Poco a poco, y siempre que ofrezcas contenido de calidad y relevante, los lectores crearán el hábito de revisar tus aportaciones.
¿Qué te parece esta técnica para conseguir contenido que alimente tu blog y tus redes sociales? ¿Ya estás aplicando curación de contenidos en tu marca? ¡Cuéntamelo en comentarios!
Imagen Chuttersnap (Unsplash)