Acabo de aterrizar en Londres, después de salir de Dubai y hacer mini-escala en Doha. Ahora estoy «haciendo tiempo» hasta las 12h., cuando podré facturar para coger mi vuelo dirección Barcelona, mi querida ciudad.
Este es uno de los pocos momentos de tranquilidad que he encontrado durante estos días de puro ajetreo. Así que ahora, con calma, puedo escribir mi post mientras una vez más, voy viendo a la gente pasar a mi alrededor, ve tu a saber hacia adonde. Fascinante sólo de pensarlo.
Hago un balance muy bueno de estos días. La verdad es que si la otra vez me dio pereza volver, esta vez aún es peor: me hubiese quedado definitivamente allí! Y no es por falta de ganas de ver a los míos – todo lo contrario, me muero por reencontrarlos -, es por las ganas enormes que tengo de empezar a ver rodar el negocio.
Durante estos días ha ocurrido de todo, he aprovechado muy bien el tiempo: he estado un par de veces con mis abogados, especialmente con Ben, un chaval de 25 años, abogado de Clyde&Co, que tanto personal como profesionalmente aparenta un tío de 30, serio, competente, y un gran profesional. Tanto hemos hablado por teléfono, que tenía muchas ganas de conocerlo personalmente. Como tiene una de estas voces «deep british», me sorprendí de verdad cuando me dijo que tenía 25 años. Un diamante en bruto para la compañía, ya lo pueden cuidar.
Después, también estuve de nuevo en las oficinas de nuestro partner, donde fui a ver la sana y salva llegada de nuestro tótem para realizar demos a potenciales clientes, así como también a llevar el media center para ese mismo tótem a Mr. Aziz, el office manager, un organizador nato de procedencia india.
También fui a Media City, la zona franca donde estableceremos nuestra oficina, para hablar con el segment manager que nos lleva el proceso. Esta era una de las reuniones que más me interesaba, primero para conocer cara a cara a la persona que gestiona el proceso de TMT, y segundo porque siempre pienso que las visitas en persona permiten que tu interlocutor te recuerde cuando vuelvas a hablar con él en el futuro, lo que ya es algo «más». La verdad que la reunión fue muy cordial y agradable, y nos explicó los próximos pasos a realizar. Tienen tal aluvión de solicitudes y procesos, que esperan poder darnos la licencia a finales de año, tal como ya preveíamos. Esperemos que no se retrase.
También he estado en la feria SIM (Signage, Imaging, Media), en Abu Dhabi, una feria pequeña pero en la que he conseguido buenos contactos que ya he empezado a sondear. Seguiré informando.
A nivel de futuros proyectos, que es lo importante, me reuní también con mi partner, y empezamos a comentar algunos asuntos que en breve ya trabajaremos para preparar propuestas. Son proyectos que en su momento, si salen, ya te los comentaré, por supuesto!
Y en la parte más lúdica, he estado un día con mi amigo Jose y toda la gente de la consultora Neoris, un grupo de gente mayoritariamente española, muy agradable, y con la que pasé una jornada muy divertida disfrutando del torneo internacional de rugby y de las cervecitas Heineken. También he conocido a Sonia, una chica catalana que también se está estableciendo en Middle East, gran persona y muy rodada, con mucha experiencia empresarial a sus espaldas.
Así que, finalizado este «segundo round», sólo me queda decir que ya me muero por volver.
Lo poco que he vivido allí me ha encantado, pero es que además veo profesionalidad, que es lo que más me gusta de todo. Ver que hay gente que no está allí viviendo la vida, sino trabajando duro para conseguir buenos frutos, me llena, me contagia, me fascina.
Y en ello estamos…Go Dubai!
